Estamos en los últimos meses de láser antes de la llegada del sol intenso y queremos asegurarnos de que todas las pieles que tratamos van a llegar sanas y bonitas a las playas y piscinas este verano.

Debemos comenzar este post hablando de los distintos problemas de fotosensibilidad que pueden asociarse a la depilación con luz o fotodepilación, ya sea con IPL o distintos tipos de láser.

Estos problemas de los que vamos a hablar pueden estar relacionados con medicamentos fotosensibles o medicamentos fotosensibilizantes. Siempre se habla de los medicamentos fotosensibles pero realmente debemos evitar la sesión de fotodepilacion si hemos ingerido medicamentos fotosensibilizantes.

¿Cuál es la diferencia?

Los medicamentos fotosensibles son aquellos que pueden sufrir cambios en composición o alteraciones en su efectividad si se exponen a la luz sin estar protegidos. Estos no nos afectan en absoluto en nuestros tratamientos con láser.

Son los medicamentos fotosensibilizantes los que no debemos perder de vista y saber que resultan incompatibles con cualquier tratamiento de depilación a través de luz. ¿Por qué?

Si a la ingesta de estos medicamentos le sumamos la aplicación de cualquier terapia de depilación a través de luz podemos tener consecuencias muy negativas basadas en reacciones fototóxicas o fotoalérgicas y siendo el primer grupo las que más preocupan a las operadoras de fotodepilación.

En las reacciones fototóxicas cuanto mayor sea la ingesta del medicamento fotosensibilizante mayor será la reacción fototóxica y esta reacción puede cursar con eritema, vesículas y ampollas, similar a una quemadura solar grave.

Las reacciones producidas por fotoalergia son más difíciles de que aparezcan y en ellas pueden aparecer picores, eccema o edemas similares a los que produce la dermatitis.

Como consejo siempre se debe tener en cuenta varios días antes de la depilación la ingesta de medicamentos y en caso de duda consultar con el profesional que se asegurará de que la sesión se realiza con total seguridad.